Homologar


No se sabe si lo contrario a las homologaciones son las heterologaciones, pero lo que está claro es que no todo el mundo consigue que se homologue su situación personal concreta.
Se homologan procesos de producción para estandarizar los patrones mínimos de calidad. Se homologan titulaciones para facilitar el intercambio de conocimiento. Se homologan los códigos ISO y las medidas del Sistema Internacional. Se homologa todo.
Se homologan ideas y se homologan derechos. El pensamiento único tiene sus pros y sus contras. El principal pro está claro que es que ha triunfado la democracia y el Estado de derecho. Los derechos civiles también se extienden y se estandarizan. Es lógico que toda mujer tenga los mismos derechos que el hombre, que puedan votar las minorías étnicas o que el trabajador tenga derecho al descanso. Es lógico, no es sólo occidental, por eso se nos ponen los pelos como escarpias cuando descubrimos que hay países o democracias de serie B en los que esto no se cumple.
Avanzamos, adaptamos y homologamos.
EE UU es una república federal en la que cada Estado tiene su propio Código Civil. Algunos Estados más desarrollados democráticamente habían aprobado libremente el matrimonio entre personas del mismo sexo y otros, no tan avanzados, directamente lo prohibieron. Hasta ahora por culpa de una cláusula legislativa federal no se podía equiparar el matrimonio de lesbianas y gays en los Estados en los que no se permitía, es decir, una pareja de dos mujeres que se casan en Massachusetts eran matrimonio en Vermont, pero ni tan siquiera pareja de hecho en Texas, Florida o Illinois.
Hasta el levantamiento de esta cláusula por parte de Obama, los ciudadanos LGTB eran ciudadanos de segunda en los Estados que así lo deseasen. Aparte de la discriminación, este trato arbitrario incide negativamente en la movilidad de las familias dentro del propio país y por lo tanto sería un lastre económico para toda el sistema nacional.
En un mundo global en el que no hay fronteras entre los países, ¿cómo podría haber habido hasta ahora fronteras interestatales dentro de un propio país para la movilidad de sus personas?
Inútil y absurdo. Lo ocurrido ahora en EE UU también ocurrirá en el espacio comunitario. Si hay movilidad de personas y los cónyuges de los ciudadanos comunitarios tienen los mismos derechos en cualquier país de la Unión, es ridículo que un matrimonio gay concertado en Bélgica pueda tener validez en Portugal, pero no en Polonia.
No es una cuestión relativa a la Carta de Derechos comunitaria, es una cuestión de los principios rectores de la UE: la igualdad de todos los ciudadanos va más allá de los Códigos Civiles nacionales. O cambian cada una de las legislaciones, o bien, habrá que buscar una forma de homologar la diversidad de familias que vivimos ahora en Europa.
Homologando lo homologable. Aumentando en derechos. Progresando, en definitiva, para que las barreras mentales se vayan derrumbando. Sólo así se construye Europa, y quien dice Europa, dice los EE UU y el resto del mundo.

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